jueves, 12 de junio de 2008

BABILONIA

Por: Arq. María Soledad Rincón Espinosa
camelot_sol@hotmail.com
Agencia




Es una obra muy ecología y esplendorosa, que se está retomando, por el problema del calentamiento global y la falta de espacios para áreas verdes. Esto son los jardines colgantes de babilonia, fue una obra impresionante para la época en que fue hecha, la gran dimensión de la construcción, el aporte de los jardines en los techos cosa que es muy difícil encontrar en nuestra época; así como las fuentes y ríos, usando sistemas de riego por alimentación de ríos.

Sobre una superficie de 19.600 metros se construyeron una serie de terrazas de piedra sostenidas por amplios arcos de seis metros de longitud hasta alcanzar una altura total de noventa. Estaban situados junto al palacio del rey, hacia el lado que daba al río para que lo pudieran contemplar los viajeros que tenían prohibido el acceso. Sobre la más alta de las terrazas se situaba un depósito de agua donde se nutría un sistema de irrigación. Ésta constante humedad y el calor característico de la zona hacían que el jardín estuviera permanentemente floreciendo. Árboles, plantas y flores de todo el mundo constituían un oasis de color.


Bajo las arcadas se construyeron amplios aposentos con una rica decoración donde los soberanos podían reposar durante sus visitas en los jardines. Flavio Josefo, escritor judío que vivió en el primer siglo de nuestra era dejó constancia del aspecto histórico. Nabucodonosor II (Siglo VI a.c.) rey, guerrero y arquitecto; ordenó levantar cerca de su palacio elevaciones de piedra, pues los ladrillos utilizados normalmente no resisten bien la humedad; le dieron la forma de montaña y plantaron toda clase de árboles. Así, edifica una serie de terrazas escalonadas en las cuales se depositó la tierra necesaria para plantar vegetación.

Desde la más alta de las terrazas se situaba un depósito de agua desde el cual corrían varios arroyuelos. También construyó una máquina semejante a una noria que transportaba el agua desde un pozo hasta los jardines para regarlos. En poco tiempo, éstos rebosan de vegetación, y las copas de sus árboles se divisaban incluso desde fuera de las dobles murallas de la ciudad. Nabucodonosor II ha consiguió crear un aparente monte cubierto de verdeante vegetación. La destrucción definitiva tiene lugar en el año 126-125 a. de C., fecha en que conquistan la ciudad y la incendian. Desde entonces no quedan más que las ruinas a orillas del Éufrates.

Los Jardines Colgantes de Babilonia probablemente no "colgaban" realmente en el sentido de estar suspendidos por cables o cuerdas. El nombre proviene de una traducción incorrecta de la palabra griega kremastos o del término en latín pensilis, que significa no justamente "colgar" pero si "sobresalir", como en el caso de una terraza o de un balcón

La construcción entre los babilonios tenía sus raíces en el suelo mismo, en sus recursos tan especiales: los antiguos procedimientos sobrevivieron por ser los únicos posibles. El ladrillo cocido, el adobe y la introducción de bóvedas desempeñan un aporte importante en la construcción.





Desiderata...




EL TATÚ para PEPEMA









La devoción a la Santa Muerte, y la devoción del tatuaje se unen para crear una tipo de expresión, ¿será esto arte?. Ustedes que opinan?

Sin ser quien es.




Por: Mariana Gonzales.
degiramagazzine@gmail.com
Comunicación /agencias



Lleva tatuado en su brazo izquierdo a la Santa Muerte y en la espalda la cara de un hombre a quién él llama “Malverde”, santo a quien se encomienda todos los días antes de salir de una de sus casas de infonavit, misma que su hermana le hizo favor de tramitar a través de un crédito que el banco gentilmente le ofreció.

Sus días son agitados pues teme encontrarse al personaje que lleva colgando en su cadena de orégano –como le llama- la muerte; ya ha dejado el alcohol y drogas pues sabe que en su trabajo no le es redituable consumir el propio negocio, además de las veintena de veces que ha llegado al hospital por su “pasones”, por la memoria de su madre, de su perro que tanto quería, por eso y por muchas razones más juro a su Dios no volver a probar ninguna mamada que lo apendejará aún más.

Cuando tenía ocho años frente a sus ojos vio como violaban a su madre, dos hombres la hicieron desnudarse ordenándole que se bañará y después se introducirá unas tubos por el ano, mientras que ellos se masturbaban y gritaban: -¡Ya vez qué pasa cuando tu padre no paga lo que debe!-.

Son recuerdos que no puede olvidar y que le hacen cuestionarse día a día el porqué hay gente que nacen, vive y muere en la miseria… se sube a su camioneta “Durango” listo para probar que le depara el destino y temiendo no quererse encontrar al que lleva tatuado en su brazo izquierdo.

Mientras espera a que el semáforo cambie a verde, introduce su memoria usb al estereo de su carro para escuchar a uno de sus grupos y canciones favoritas “los corridos”, su música se ve interrumpida por un hombre que se trepa a limpiarle el vidrio. Lo ve y el tipo del vidrio se queda desconcertado.

Sigue viendo detenidamente al hombre y piensa en lo que hubiese sido de él si no hubiera conocido su negocio de estupefacientes, y sino hubiera matado a los 16 cristianos inocentes que debió eliminar para ganarse el respeto que hoy le merecen.

Él no conoce el respeto, ni el valor; la vida y la gente de la que está rodeada se han encargado de enseñarle a hacer lo que es, nada le ha dado la sociedad para ser otra persona.

Estaciona su carro del lado izquierdo de la calle, baja y dirige su mirada hacia un espectacular que anuncia una coca cola sin calorías, sigue caminando y avanza a la entrada de un hotelucho de cuarta que tiene por nombre “Salón Victoria”, entra y no se dirige hacia el recepcionista, sigue caminando hasta que llega a la habitación número seis, abre la puerta pero no hay nadie.

Se dirige al baño y busca con la mirada desesperada hasta que ahí lo ve, le grita y pregunta a la vez: lo trajiste, “no” dice una voz cortante… Pues ya mamaste guey…

Retumbó un ruido ensordecedor en los demás cuartos de “Salón Víctoria”.

Y vuelve a salir pensando: “Lo que tengo que hacer para ser quien soy y no acabar limpiando parabrisas en la calle”.






Desiderata...